Las electrobombas son el núcleo de innumerables sistemas de abastecimiento, riego, drenaje y procesos industriales. Entre las más utilizadas se encuentran las centrífugas, verticales y sumergibles, cada una con características específicas según la aplicación.
1. Importancia del mantenimiento de electrobombas
Un programa de mantenimiento planificado permite:
- Asegurar un caudal constante y presión adecuada.
- Evitar paradas inesperadas en procesos críticos.
- Reducir el consumo eléctrico mediante un funcionamiento óptimo.
- Prevenir daños mayores en componentes mecánicos y eléctricos.
- Cumplir con las exigencias técnicas y normativas en instalaciones.
2. Tipos de electrobombas y puntos clave de mantenimiento
a) Bombas centrífugas
Usadas para mover grandes volúmenes de agua a baja presión.
Mantenimiento clave:
- Verificar alineación entre bomba y motor.
- Inspeccionar sello mecánico y empaquetaduras para evitar fugas.
- Lubricar rodamientos según especificaciones.
- Revisar el impulsor por desgaste o incrustaciones.
b) Bombas verticales
Ideales para pozos profundos o sistemas industriales donde el motor está en superficie y el impulsor sumergido.
Mantenimiento clave:
- Verificar lubricación de rodamientos intermedios.
- Revisar ejes y acoples para evitar desalineaciones.
- Controlar el estado de las columnas y tuberías.
- Inspeccionar sistema de sellado y protección contra ingreso de partículas.
c) Bombas sumergibles
Instaladas directamente en el líquido a bombear, muy utilizadas en drenajes, alcantarillado y pozos.
Mantenimiento clave:
- Revisar el cableado y sellado eléctrico para evitar filtraciones.
- Limpiar rejillas y filtros de entrada.
- Comprobar el funcionamiento del sistema de flotadores o sensores de nivel.
- Verificar el impulsor y carcasa por daños o desgaste.
3. Procedimiento general de mantenimiento
- Desconectar la alimentación eléctrica y aplicar procedimientos de seguridad.
- Limpieza interna y externa para eliminar sedimentos, incrustaciones o residuos.
- Inspección visual de carcasa, conexiones y acoples.
- Verificación eléctrica de resistencia de aislamiento y continuidad.
- Lubricación de rodamientos y piezas móviles.
- Pruebas de funcionamiento bajo condiciones reales.
- Registro de las acciones para llevar historial de mantenimiento.
4. Frecuencia recomendada
- Uso continuo en industria o bombeo municipal: revisión mensual y mantenimiento trimestral.
- Uso agrícola o comercial frecuente: revisión cada 3-6 meses.
- Uso ocasional o doméstico: inspección anual.
5. Consejos para prolongar la vida útil
- Mantener un programa de limpieza y lubricación periódica.
- Evitar el trabajo en seco para no dañar sellos mecánicos.
- Proteger el equipo de sobrecargas eléctricas y golpes de ariete.
- Usar repuestos originales y de calidad.
- Capacitar al personal en el uso correcto de cada tipo de bomba.